Persisten las dudas judiciales y la incertidumbre sobre quién está a cargo de la investigación, así como la falta de decisiones respecto a la continuidad del proceso. Han pasado trece días desde el trágico 13 de junio, fecha en que Loan Danilo Peña fue visto por última vez. Desde el dolor de la familia y la atención mediática hasta las preocupaciones políticas y judiciales, se percibe un período de incertidumbre en los círculos clave del caso: los fiscales iniciales se han apartado y la Justicia Federal aún no ha determinado su competencia.

Recientemente, la jueza Cristina Pozzer Penzo recibió el expediente y lo remitió al fiscal federal Mariano Guzmán. Este último deberá decidir si considera que podría haber una red de trata implicada en la desaparición del menor, determinando así la competencia correspondiente. Posteriormente, la jueza tomará la decisión final sobre si aceptar o no la causa; de rechazarla, el caso retornaría a los fiscales originales, lo que podría estancar el proceso.

Patricia Bullrich mantuvo tres reuniones ayer en Corrientes: primero con las fuerzas de seguridad federales y provinciales, luego con la jueza federal que podría asumir la investigación, y finalmente con los fiscales provinciales que hasta ahora han detenido a seis personas, considerando a Loan víctima de una posible red de trata de personas.

Independientemente de quién continúe con la causa, la búsqueda de Loan sigue activa. Se aguarda el análisis de los registros telefónicos activados y desactivados el día de los hechos, especialmente en la casa de la abuela de Loan, donde fue visto por última vez.

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